Hoy ha sido un día
Kalashnikov contra lápices. Fanatismo contra risas.
Hoy hablan las viñetas de todo el mundo recordando que sin libertad de expresión no hay libertad alguna. En pleno corazón del París de la Ilustración, del París revolucionario, del país que lleva la libertad por bandera.
Es un sarcasmo que haya ocurrido muy cerca del Boulevard Voltaire. Hoy más que nunca Voltaire contra el fanatismo, como así atestiguan estos textos de su Diccionario filosófico.
Fanatismo
“Fanatismo es el efecto de una conciencia falsa, que sujeta la relación a los caprichos de la fantasía y el desconcierto de las pasiones.”
“Es horrible examinar el modo cómo la creencia de apaciguar al cielo por medio de la matanza, en cuanto se introdujo, se esparció universalmente por casi todas las religiones; que multiplicaron los motivos de hacer el sacrificio para que nadie se escapara de la inmolación.”
“Entiéndese hoy por fanatismo una locura religiosa, sombría y cruel. Es una enfermedad del espíritu que se adquiere como las viruelas. Los libros la comunican menos que las asambleas y que los discursos. Rara vez nos acaloramos leyendo, porque entonces estamos sosegados; pero cuando el hombre ardiente y de ingenio habla con entusiasmo a imaginaciones débiles, sus ojos centellean, y el fuego de sus miradas, de su voz y de sus ademanes se contamina, y conmueve los nervios del auditorio.”
“El fanatismo es a la superstición lo que el delirio es a la fiebre, lo que la rabia es a la cólera. El que tiene éxtasis, visiones, el que toma los sueños por realidades y sus imaginaciones por profecías, es un fanático novicio de grandes esperanzas; podrá pronto llegar a matar por el amor de Dios.”
“Los fanáticos están convencidos de que el Espíritu Santo, que les inspira, es superior a la leyes, y que su entusiasmo es la única ley que debe dirigirlos.”
Libertad de imprenta
“Si el libro os desagrada, refutadle; si os fastidia, no lo leáis.”