Ayer tuve la oportunidad de presentar públicamente el Manifiesto UnInPública (acrónimo de Universidades por la Innovación Pública) con motivo de la Semana de la Innovación Pública organizada por la Secretaría General Iberoamericana en un panel en el que participaron:
- Rita Grandinetti, Universidad Nacional de Rosario (Argentina). Principios de la innovación pública desde las universidades.
- José Carlos Mota, Universidade de Aveiro (Portugal). Formas de la innovación pública en las universidades.
- Loredana Stan, Novagob (España). Universidades y ecosistema de innovación pública.
- Fernando Vilariño, Universidad Autónoma de Barcelona (España). Laboratorios como instrumento para la innovación y el papel de la tecnología.
- Ivana Bentes, Universidade Federal de Rio de Janeiro (Brasil). Investigación y gestión universitaria e innovación pública.
- María Paz Hermosilla, Universidad Adolfo Ibañez (Chile). Docencia universitaria y la innovación pública.
Este Manifiesto supone la culminación de una serie de trabajos que se iniciaron en el Encuentro virtual desarrollado el pasado mes de mayo bajo la organización de la Universidad de Granada, la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB) y los ministerios de Ciencia e Innovación y de Universidades del Gobierno de España. Bajo la coordinación de la Universidad de Granada, a través de su Dirección de Participación e Innovación Social – Medialab UGR, se publica un Manifiesto que aborda el modo que las universidades pueden contribuir a la innovación pública para abordar los retos de nuestras actuales sociedades.
El texto comienza con las siguientes palabras:
“Nuestro mundo ha alcanzado en las últimas décadas amplios niveles de desarrollo económico, social, cultural y tecnológico que se caracterizan por una elevada aceleración de los procesos de transformación, por un incremento de la desigualdad y por una profundización de los diversos impactos, tanto sociales como medioambientales. La Agenda 2030 de las Naciones Unidas y los Objetivos de Desarrollo Sostenible que la integran constituyen una respuesta global a esta situación en la que la incertidumbre se erige como un factor clave de inestabilidad alimentada por una creciente polarización social y política. Muchos de estos fenómenos se han visto además potenciados por la irrupción de la pandemia causada por el coronavirus Covid-19, situando al mundo ante una crisis de naturaleza y dimensión no conocida en los últimos 100 años.
La gestión, tanto del conocimiento como de la ignorancia, es clave en un mundo que pide respuestas frente a las incertidumbres de nuestro tiempo. La integración de múltiples saberes para crear modelos de gobernanza adecuados a los retos que enfrentamos exige creatividad e innovación, particularmente en las sociedades democráticas. La gestión de lo público como forma de garantizar el bienestar y como vehículo para diseñar una gobernanza global es determinante si queremos abordar los retos actuales. La ciudadanía, más que nunca apoyada por un cambio de cultura y por las posibilidades de la tecnología, exige participar de forma más continua y activa en la gestión de lo común. Los gobiernos deben hacer frente a estas demandas innovando para proporcionar mejores servicios apoyados en modelos de gobernanza más abiertos, participativos, inteligentes y complejos. En este panorama, las universidades constituyen actores clave por su labor de investigación y de formación, siendo cada vez mayores las expectativas que la sociedad tiene en su capacidad para producir un impacto social en la transformación de las condiciones de vida del territorio en el que se sitúan.
Es en este marco donde la innovación pública surge como respuesta, situando a las universidades como instituciones centrales para su fomento a través de alianzas con los gobiernos y otros actores en una nueva apuesta por entender la transferencia de conocimiento también a través de la producción, la innovación y el diseño de políticas publicas con la cocreación y colaboración de todos los agentes sociales implicados. Las universidades y la Administración Pública están ante un momento clave para apostar de forma decidida por la incorporación en su agenda de la visión propuesta desde los laboratorios de innovación social que, desde enfoques ciudadanos, persiguen abrir y consolidar un sistema de innovación que al igual que el de salud tenga un horizonte de universalidad. Esto implica que apostar por la innovación pública desde las universidades debe hacerse desde la apertura y la accesibilidad para que toda la ciudadanía y los agentes sociales que lo deseen, tanto dentro como fuera de la institución, puedan trabajar en el desarrollo de mejores políticas públicas”.
El Manifiesto UnInPública puede consultarse en este enlace. También puede descargarse en formato PDF.