Publico el texto introductorio que he escrito como prefacio al informe Influencia Política de la UGR – Un informe institucional sobre la influencia de la investigación de la UGR en las políticas públicas medida a través de las menciones recibidas en ‘Policy Reports’. Edición – 2024 https://zenodo.org/records/13999133
La sociedad exige que las universidades y los centros de investigación no solo produzcan conocimiento per se, sino que este tenga un impacto real en las transformaciones sociales y económicas. Generar este impacto a través de la influencia en el diseño, implementación y evaluación de las políticas públicas constituye una perspectiva que muy recientemente ha recibido una atención prioritaria tanto en el ámbito europeo como nacional. La mejora de las políticas públicas permite ejercer un efecto palanca sobre todo el sistema ayudando a fortalecer nuestros sistemas democráticos de gobernanza y dar un mayor valor social al papel de las universidades.
Las sociedades democráticas no son tecnocracias: reconocen que no todo conocimiento útil para la toma de decisiones es de carácter experto; sin embargo, una sociedad avanzada como la nuestra no puede eludir el carácter único e imprescindible del conocimiento científico para la toma de decisiones. La controversia entre la figura del político y del científico no es nueva; no obstante, actualmente su interrelación está en una fase de redefinición y fortalecimiento. En este contexto, la estrategia “Science for Policy” (ciencia para las políticas públicas), impulsada especialmente por la Comisión Europea, se ha convertido en una referencia. Su objetivo es conectar a la comunidad investigadora con quienes toman decisiones, promoviendo una mayor incidencia científica en el diseño de políticas basadas en evidencias.
En los últimos años, España ha logrado avances relevantes en este campo, situándose en una posición de liderazgo en el contexto europeo. En 2021, se creó la Oficina C del Congreso de los Diputados bajo la coordinación de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), destinada a proporcionar evidencias científicas a consultas parlamentarias. Más recientemente, en 2024, el Gobierno español estableció la Oficina Nacional de Asesoramiento Científico (ONAC), vinculada a Moncloa, para fortalecer aún más esta conexión entre ciencia y política, apoyando con recursos y reconocimiento político este empeño determinante para una mejor acción de gobierno a todos los niveles.
La Universidad de Granada es pionera y referente en la conexión con el territorio y las políticas públicas a través de la iniciativa Impronta Granada, una alianza con la Diputación de Granada que impulsa la conexión entre la comunidad universitaria y los retos de la provincia de Granada, así como de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Sin embargo, con más de 3.600 investigadores, nuestra Universidad tiene un impacto que va más allá de lo local o regional, abarcando niveles nacional, europeo y global.
El informe Influencia Política de la Universidad de Granada representa un paso pionero al ofrecer una metodología cuantificable para evaluar cómo los estudios científicos de nuestra institución están presentes en informes y documentos de políticas a nivel gubernamental y en think tanks. Este enfoque permite visibilizar y medir el valor real de la investigación académica en la construcción de políticas públicas más efectivas y basadas en evidencia.
Confío en que el informe de la Universidad de Granada marque un hito al ofrecer una primera aproximación al modo en que una universidad pública de nuestro calibre puede influir significativamente en el diseño de políticas públicas. Este informe no solo va dirigido a la comunidad universitaria, sino también a los policy makers, a instituciones y a la ciudadanía, mostrando de manera clara cómo el conocimiento académico se traduce en acciones y estrategias tangibles que nos benefician a todas las personas.
Si bien el informe representa una de las múltiples formas en que influimos en el ámbito de las políticas públicas, su metodología innovadora y su rigor académico proporcionan un instrumento de medición clave. El informe está liderado por Daniel Torres Salinas, a través de la Coordinación para la Evaluación del Impacto Social en el Vicerrectorado de Innovación Social, Empleabilidad y Emprendimiento. Daniel es uno de los mayores expertos nacionales e internacionales en evaluación de la ciencia y, sobre todo, en la búsqueda de soluciones innovadoras para la medición de su impacto en aquellos ámbitos que la sociedad demanda. Más allá de los modelos bibliométricos clásicos, aquí se sigue experimentando, como en tantas otras ocasiones, para responder a las demandas sociales y políticas de nuestro tiempo.
Este informe no solo refleja la capacidad de la Universidad de Granada para liderar iniciativas dentro de este nuevo marco de “Science for Policy“, de ciencia para las políticas públicas, sino que también fortalece nuestro rol en iniciativas como Impronta Granada y otras políticas enfocadas en la mejora del bienestar social. Con cada avance en esta línea, nuestra universidad reafirma su compromiso en contribuir activamente al bienestar de la ciudadanía, promoviendo un modelo académico que no sólo genera conocimiento, sino que impacta directamente en la mejora de la sociedad a través del mismo.